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Dove, en colaboración con la agencia Ogilvy New York y el equipo de Unilever en el Reino Unido, ha lanzado su innovadora campaña "Unready for Anything" al inicio del Año Nuevo, redefiniendo los estándares de belleza hacia una visión más auténtica y real. Esta campaña global se enfoca en los momentos "no preparados", capturando la belleza en su estado más puro y espontáneo, lejos de la perfección tradicionalmente retratada en los anuncios.
La esencia de "Unready for Anything" es mostrar cómo la belleza real se manifiesta incluso después de que las luces de la fiesta se apagan. Utilizando el icónico Dove Beauty Bar, la campaña celebra los restos de maquillaje y los brillos de las celebraciones como símbolos de momentos genuinamente vividos.
Según Camilla Clerke, Directora Creativa Ejecutiva para Unilever en Ogilvy, la campaña busca capturar esos momentos alegres y vibrantes de la vida que a menudo quedan ocultos tras la búsqueda de una imagen perfecta.
El lanzamiento de la campaña se llevó a cabo en locaciones icónicas como Times Square en Nueva York y Carnaby Street en Londres, aprovechando la efervescencia de las celebraciones de Año Nuevo para maximizar su impacto. La estrategia mediática, orquestada por Mindshare, fue crucial para asegurar una visibilidad óptima.
La primera serie de creatividades de "Unready for Anything" se enfocó en el ritual de desmaquillarse usando el Dove Beauty Bar, destacando la importancia de cuidar la piel incluso después de una noche de festejos. Las imágenes y vídeos destacan la simplicidad y eficacia del producto en un contexto festivo, repleto de confeti y destellos dorados.
"Unready for Anything" no es solo una campaña para Año Nuevo, sino un concepto que Dove planea adaptar a lo largo del año para diversas celebraciones, continuando con su mensaje de que la verdadera belleza encuentra su lugar en cada aspecto de nuestra vida. Este enfoque ha resonado no solo entre consumidores, sino también dentro de la industria, recibiendo elogios por su enfoque fresco y auténtico hacia la belleza.
La iniciativa de Dove no solo desafía las normas convencionales de la publicidad de belleza, sino que también alienta a las personas a celebrar su belleza única y real, sin filtros ni pretensiones. Al hacerlo, Dove fortalece su compromiso de largo plazo con promover una imagen positiva del cuerpo y la autoaceptación entre sus consumidores alrededor del mundo.
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